Los municipios de Ibros y Castellbell y Vilar (Barcelona) han ratificado el acuerdo de hermanamiento en un acto público celebrado ayer, primero de mayo, en el teatro municipal de Ibros, repleto de personas. Muchos de los asistentes eran ibreños afincados en la localidad catalana que han querido sumarse a este evento, coincidiendo con el inicio de las fiestas de La Remediadora.
El alcalde de Ibros, Juan Matías Reyes Mendoza y la alcaldesa de Castellbell y Vilar, Montserrat Badía Moreno, firmaron el acta de hermanamiento de estas dos localidades, lejanas en la distancia, pero cercanas en sentimientos, que le unen vínculos de fraternidad a través de las numerosas familias de ibreños que residen en la localidad barcelonesa desde la época de los años sesenta del siglo pasado, cuando emigraron a tierras catalanas en busca de trabajo.
El día 12 de agosto del año pasado se celebró el primer encuentro de hermanamiento en tierras catalanas. En esta ocasión el alcalde de Ibros, Juan Matías Reyes, pronunció el pregón de las fiestas y firmó el acta protocolaria en el Ayuntamiento de Castellbell y Vilar. Con la firma de ayer en Ibros entre ambos regidores queda definitivamente confirmado el acuerdo de hermanamiento.
El teatro municipal de Ibros se llenó de público para recibir con todos los honores a los alcaldes y ediles de las corporaciones de ambos municipios, con la presencia de todos los alcaldes que ha tenido Ibros desde el comienzo de la democracia. En el acto, presentado por la periodista Paola Serrano, intervino Antonio Garrido, cronista oficial de la villa e hijo predilecto de Ibros. Se refirió al encuentro indicando que “Es un día grande para Ibros y para Castellbell y Vilar porque el hermanamiento es un homenaje a nuestra propia identidad. Estrechamos lazos con un pueblo como otros de Cataluña que, hace más de medio siglo, recibió a un nutrido grupo de ibreños que, no sólo fueron bien acogidos por aquella comunidad, sino que se han sentido felices allí. Nosotros no lo hemos olvidado y ellos, creo, que tampoco han olvidado cuáles son sus raíces”.
Por su parte, la alcaldesa de Castellbell y Vilar, Montserrat Badía Moreno pronunció unas emotivas palabras de agradecimiento al pueblo de Ibros en un día –señaló- que era especial para el municipio que representa. Mostró su agradecimiento a las familias de Ibros que llegaron a la localidad catalana hace más de sesenta años, “Nos ayudasteis a construir nuestro pueblo. A levantar el pueblo que somos hoy. Eran los años iniciales de los sesenta y no llegábamos a los tres mil habitantes, teníamos una población mayor que no cubría la necesaria mano de obra de las empresas, industrias textiles. Fue creciendo nuestra población, nuestras calles se convirtieron en calles con vida, calles con muchos acentos, que nos gustan porque les queremos”.
Por eso –señaló- que “es de justicia hacer un reconocido homenaje a todos esos vecinos que en su día dejaron su tierra, la misma en la que hoy sus hijos, sus nietos, pueden volver a refugiarse y encontrar las casas que conservan en aquellas calles de Ibros”.
Terminó el turno de intervenciones el Alcalde de Ibros, Juan Matías Reyes Mendoza, que agradeció la presencia en el acto de los ex alcaldes de Ibros, que fueron regidores de la villa en la etapa democrática, que se cumplen 44 años. Tuvo un recuerdo para todos los ibreños que están repartidos por el mundo y siguen siendo militantes de su origen e identidad.
“Tenemos el deber y la obligación moral de no olvidar a ninguno de los ibreños que salieron, ni su ascendientes y descendientes, para eso, entre otras cosas, sirve el hermanamiento, para tener memoria, sentar las bases con un compromiso y rendir tributo a los nuestros, es una deuda pendiente y en parte ahora la tenemos saldada”, señaló el alcalde.
En el acto hubo intercambio de regalos y placas conmemorativas entre ambas instituciones, entre los responsables de protección civil de ambas localidades, de los concejales de cultura y de las corporaciones municipales representadas por el alcalde de Ibros y la alcaldesa de Castellbell y el Vilar.
Castellbell y Vilar es un municipio barcelonés de la comarca del Bagés que cuenta con alrededor de cuatro mil habitantes. En la década de los años 50 y principios de los 60 del siglo pasado fueron muchas las familias de Ibros la que se asentaron en este territorio atraído por el trabajo existente, consiguiendo sus primeros empleos en las industrias textiles Manufacturas Borrás y Torcidos Ibéricos, recordadas en este acto de hermanamiento que, tendrá como prioridad, estrechar lazos de amistad y de colaboración entre ambos municipios.
El hermanamiento de Ibros con el municipio barcelonés de Castellbell y Vilar se suma al celebrado en el año 1984. En esta ocasión, La Villa de Ibros se hermanó con el pueblo granadino de Valor, repoblado por numerosas familias de Ibros en el siglo XVI. También, en el año 2007, en ese caso la Hermandad de la Virgen de los Remedios de Ibros estrechó lazos de unión con la Hermandad del mismo nombre de Colmenar Viejo en Madrid, lugar, también, donde residen muchas familias originarias de Ibros desde el siglo pasado.